Mientras, él ahoga su ira en el coñac, que quema una y otra vez su garganta con cada trago que sorbe. Sabe que otra vez hizo mal. Se siente culpable y empieza a llorar. Pero esta vez es distinto, Tina se ha ido.
El rostro de Tina, se muestra muy lívido. Su mirada absorta, se nubla. Un escalofrío azota su cuerpo. Sus piernas flojean y se desvanecen poco a poco, mientras su voz asustadiza ruega descanso al suelo.
Su aturdimiento evoca el primer golpe, propinado a los pocos días de vivir juntos. Luego, en la cordura él se arrepintió y justificó sus actos atribuyéndoselos al alcohol. Ella perdonó pero en el amor se desilusionó y las mariposas que alborotaban con ternura su pecho, desmoronaron su vuelo, perdieron colores y nunca más hicieron cosquilleo.
Alguien se avecina. Tina se asusta. ¿Es su peor enemigo quién la busca? No mira, se acurruca más sobre sí misma. CONTINUARÁ
Me gusta esta historia como va hasta ahora, Mary. Es un tema que me da vueltas en la cabeza desde hace tiempo y me dan ganas de escribir sobre ello también. Estoy expectante a ver como sigue.
ResponderEliminarGracias María por leer mis palabras incondicionalmente. Espero que "Vuelo Libre" ahonde en los corazones y sensibilice de una forma especial, tanto como lo hizo en mí cuando tuve la preciada oportunidad de leerlo. Saludos.
ResponderEliminarGracias por tus historias. Sinceramente, creo que tienes talento, pero es una pena que malgastes tu pluma en temas recurrentes, llenos de tópicos y, a veces, hiperadjetivizados. Te quedas en lo superficial, sin alcanzar el fondo. Es importante la descripción, que duda cabe, pero es mucho más necesario escribir con profundidad, hallar lo que otros no han hallado, penetrar en las entrañas de la palabra escrita. Es necesario que cuando escribas, sientas un desgarro, en ocasiones incluso puede ser doloroso. Solo entonces te acercarás a la auténtica belleza.
ResponderEliminarEres un diamante. Sigue trabajando, no te conformes, continúa escribiendo y exigiéndote más y mas. Escribir es un aprendizaje. Lee a los grandes (los que de verdad tocan el alma de quienes los leen) ellos te lo enseñaran casi todo.
Seguiré tu progresión con anhelo.
Agradecimiento a Anónimo.
ResponderEliminarQuería agradecer tu exposición. Me gustaron tus palabras tanto las de elogio, como las de crítica. Me invitaron a reflexionar sobre varios aspectos, que pueden ser mejorables. Pero, como bien dices, escribir es un aprendizaje y en estos momentos estoy sometida a su ardua enseñanza. De momento pretendo conseguir un hábito, que me permita entrenar y a ser posible progresar.
Te invito a que nos pongamos en contacto a través del facebook e intercambiemos impresiones.
Facebook: Mary Torres Cantero
Un saludo.
HOLA Mary, yo pienso que en esto de escribir cada uno tiene su estilo. Yo quiero apoyarte una semana más y desde aquí te mando un beso.
ResponderEliminarEs curioso cómo un texto puede tener efectos tan distintos en la gente. A mí tu forma de escribir me lelva muy adentro en la historia. Me encanta la forma tan minuciosa que tienes de describir los escenarios y situaciones, me hace partícipe de los acontecimientos. Me he reído con tus relatos, me he emocionado hasta la lágrima, me he estremecido,... vaya, para mí sí llegas al fondo.
ResponderEliminarMucho ánimo para seguir trabajando y progresando.
Un abrazo
Yo creo además de lo que dice Alejandro, que más que temas recurrentes son temas de mucho interés pero arriesgados y se escriben porque están ahí y uno no puede temer hacerlo por correr el riesgo de falta de rareza, porque la escritura es sobre todo libre, personal y evoluciona en direcciones insospechadas muchas veces, sorprendiendo, emocionando.. Todo el mundo es original con temas o enfoques inusuales que en muchos casos no llegan a ser más que excentricidades, y realmente, todo cabe. Es más difícil llegar de esta manera. Además la belleza se manifiesta de tan distintas formas para cada uno…
ResponderEliminarEs muy complicado hacerlo estupendamente para todo el mundo, porque somos muy distintos. Yo no tengo ninguna duda de que tú lo estás haciendo maravillosamente, y que mantengo la voluntad de seguirte, no solo porque eres una extraordinaria persona, no tiene nada que ver; es más, porque me gusta mucho leerte y porque creo que lo haces realmente muy bien(señorita escritora y más cosas). Un abrazo enorme. Araceli
Mary,
ResponderEliminarinteresante el debate que se dio a partir de esta entrada.
Anónimo tiene razón en algunos aspectos (evitar adjetivos en la medida de lo posible, evitar la voz pasiva también resulta, da vida -esto último lo comento a título personal-), pero ante todo, y aunque entiendo y respeto su punto, no necesariamente hay que desgarrarse para hacer sentir, es necesario, creo yo, ante todo, encontrar la voz propia, y en eso no hay ataduras, ni reglas, quizá una mezcla de intuición y razón, y ni eso, porque nadie en este planeta puede fijar las reglas en las que se debe basar el arte, de ahí la rápida caída de quienes imponen, y no convencen; de ahí que mientras Pinochet, Hitler o Franco se pudren en un cielo muy lejano, Gandhi o Martin Luther King, y para hablar de escritores, Rabindranath Tagore, Lorca, Borges, Huidobro, Paz -y cientos de miles más, por supuesto-, vivan en la parte noble de los corazones humanos.
En fin, se respeta a Anónimo, pero no se coincide en todo, aunque hemos de decir que tocó un tema muy importante que destaca su capacidad de reflexión. Bien por ella o él, pero en cuanto al arte, como en la vida, "que cada quien encuentre su verdad ahogándose tan profundamente como sea necesario".
¡Besos y seguimos por tu encantador blog, Mary!